sábado, 2 de febrero de 2008

Una feliz coincidencia


Mi hermano es ilustrador. Crecimos compartiendo aficiones: él reparó en mi música, mis juegos de manos, mis sellos... y yo echaba de vez en cuando un vistazo a sus comics. Entre tantas historietas, me dejaron un entrañable recuerdo las de un dibujante que presentaba la cotidianidad de unos niños en un orfanato durante la posguerra. Con trazos delicados y certeros, junto con un diálogo que retrata a la perfección la infancia de aquella época, hay en estas obras de arte en forma de viñetas una ternura implícita, en contraste con una realidad cruel de frío, hambre, consignas y soledad.

Lo cierto es que hace poco me vinieron a la mente esas historietas y, tal vez por nostalgia, el deseo de volverlas a disfrutar. Pero no recordaba el nombre del dibujante ni el título. Una tarde, buscando un disco en unos almacenes, me di de bruces con el compendio ideal a un precio módico: "Paracuellos" la serie de historietas que Carlos Giménez realizó entre 1977 y 2003; 607 páginas. Carlos Giménez conoció aquella realidad del Auxilio Social, en el contexto de una España severa y violenta tanto fuera como dentro de aquellos "hogares".

Al final de la jornada me acuesto y leo "Paracuellos". Entonces me pregunto si debiera apagar la calefacción o si la cena podía haber sido más ligera.

2 comentarios:

Alkazaba dijo...

Supongo que lo que reflejaron esas historietas entre 1977 y 2003 corresponde a otra época mas lejana... ¿digo yo?

Mister Enigma dijo...

Sí claro. Vea que escribo:

"un dibujante que presentaba la cotidianidad de unos niños en un orfanato durante la posguerra." Sitúe los relatos entre 1940 y 1950.

Creo que a usted le gustaría este compendio, tanto por la calidad de los dibujos -cuyos personajes no me han quedado muy bien escaneados-, como por la agudeza psicológica y un cierto tono crítico-emotivo, más que de revancha.